Las estrellas enanas blancas típicas contienen una vez y media la masa del Sol en un volumen como el ocupado por la Tierra. Cuando llegan a la fase más crítica de su agonía, estallan en un tipo de supernova que los astrofísicos creen que fabrica la mayor parte del hierro del universo. Pero estas supernovas de tipo Ia, como se denominan, también pueden ayudar a desvelar algunos detalles sobre la misteriosa energía oscura, una fuerza desconocida que domina al universo.
Artículo en inglés con instantáneas del modelo 3D.
Artículo en español.
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2 comentarios:
El tema es fascinante, y, de tener más tiempo (ahora estoy en el trabajo y me asomo para echar una simple mitrada)haría algún comentario al respecto de esta maravillosa transición de fase de estrella tipo Sol a estrella enana blanca y los procesos que en ese camino se tiene que cumplir para poder llegar de la una a la otra.
Por mucho que repaso sobre estas cuestiones, y, por mucho que se ellas pueda aprender, no importa cuanto, a mí, nunca dejan de sorprenderme y maravillarme.
Claro que, viendo la evolución de una estrella de este tipo y estudiando como nació, como ha sido su vida durante miles de millones de años y como al llegar a su final se eleva a Gigante roja y más tarde, tras la explosión supernova dejando una nebulosa, se convierte en enana blanca con esa densidad tan enorme y un radio tan pequeño que, la convierte en uno de los objetos estelares más densos que existen en el Universo.
En fin amigos, otra maravilla más del Cosmos al que pertenecemos.
Repasando páginas del pasado me doy de bruces con esta que editaba el amigo Chapu (¿Dónde estará?, y, me causa alegría viajar hacia atrás en el tiempo para ver y comentar sobre hechos y personajes que, en el Universo holográfico de Internet, tuvimos el honor de contactar.
La enana blanca tiene una historia que debe ser contada:
El Sol agotará su combustible nuclear de fusión y se convertirá en Gigante roja, engullirá Mercurío y Venus y quedará muy cerca de la Tierra que, se quedará sin océanos evaporados por las altas temperaturas, y, la vida, tal como la conocemos, desaparecerá.
Pero vayamos a la enana blanca: Una vez la gigante roja arroje sus capaz exteriores al espacio Interestelar para formar una Nebulosa planetaria, el resto de la masa del Sol moribundo, comenzará a contraerse sobre sí mismo.
Cuando el Sol está fusionando materiales sencillos en otros más complejos, tiende a expandirse y sólo lo impide la fuerza gravitatoria que tan ingente masa genera. Así, la fusión que quiere expandirse es frenada por la Gravedad alcanzando así la estabilidad del Sol.
Claro que, una vez que no hay fusión, la Gravedad queda libre y estruja y estruja a toda esa masa que la densifica más cada vez. Entonces, en el proceso, los electrones que están ahí en los átomos de esa materia, se ven comprimidos.
Aquí tenenos que recordar el Principio de exclusión de Pauli, en el que nos dice que los Fermiones no pueden ocupar el mismo lugar teniendo el mismo número cuántico, y, de esa manera, los electrones al verse tan juntos, sienten una especie de clustrofobia y se degeneran, de manera tal que comienzan a moverse a velocidades relativistas y, tal movimiento alucinante, es capaz de frenar a la fuerza gravitatoria, y, de esa manera, alcanza la estabilidad la enana blanca que, durante 100 años, radiará en el ultravioleta rabioso ionizando el material de la Nebulosa globular.
Si la masa de la estrella es mucho más, lo que quedará será una estrella de neutrones y si es supermasiva, irá directa a convfertirse en agujero negrol.
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