Este pequeño satélite de Saturno, muy próximo al anillo E y, en parte, causante de éste, es una verdadera caja de sorpresas. Es el cuerpo más reflectante del sistema solar. Su superficie de hielo puro de agua tiene un albedo de 0,99 (ya veis, no es Ariel quien lava más blanco, sino Encelado). Su topografía no es menos curiosa, pues su hemisferio norte está lleno de cráteres y su hemisferio sur es mucho más liso y joven, producto de la geología del satélite. Hablando de geología, Encelado emite agua y pequeñas partículas de hielo a modo de géisers y se piensa que su subsuelo contiene bolsas de agua líquida a una temperatura mayor de 0º Celsius. Quien sabe, a lo mejor la vida nos espera desde Encelado.
Esta maravillosa foto fue enviada desde la sonda Cassini. Ya sabéis, pulsad en la foto para ampliar.
Esta maravillosa foto fue enviada desde la sonda Cassini. Ya sabéis, pulsad en la foto para ampliar.
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